Quién fue Angélica Mendoza, la candidata a presidente que enfrentó a Yrigoyen

Quién fue Angélica Mendoza, la candidata a presidente que enfrentó a Yrigoyen

Angélica Antonia Mendoza nació en Mendoza el 22 de noviembre de 1897. Siempre “La Negra”; como el afectuoso apodo infantil de sus seres queridos o como la peyorativa subestimación descriptiva de sus rivales. Fue detenida, echada de su trabajo, injuriada, procesada por desacato, exiliada, estuvo presa varias veces. Fue gremialista, militante política y discriminada hasta por su propio partido. Ya terminando la segunda década del siglo XX, en medio de un acto gremial ante 1.500 personas en el pueblo de Rivadavia, durante el tiempo de las primeras huelgas docentes del país, las fuerzas de seguridad mendocinas irrumpieron violentamente en el mitin, suspendiendo “a puro palos” el evento. “La Negra” fue arrestada. El policía que la llevaba esposada le gritó: “¡Revolucionaria de mierda, ahora vas a parar al calabozo!”. Era un 30 de setiembre de 1919. La revolución rusa había triunfado hacía recién dos años. Ella lo miró. “Señor; le faltó decir que también soy mujer y soy maestra”. Toda una carta de presentación para la “Negra” Mendoza.

Había estudiado en el histórico colegio Normal de Mendoza. Los conflictos docentes que acarreaba el gobierno de José Néstor “El Gaucho” Lencinas eran muchos. Los maestros habían votado masivamente a Lencinas ante el liberal Civit esperando una recomposición salarial y una mejora en las condiciones laborales, algo que no sucedió.

Angélica Mendoza

Luego de ocho meses sin cobrar los salarios, y antes de comenzar el ciclo lectivo de 1919, un grupo de maestros lanzaron la “Revista Idea” donde manifestaban claramente la cruda realidad que vivía el magisterio mendocino. Como respuesta, el gobierno escolar de la provincia a cargo de Enrique Julio (Director General de Escuelas), suspendió por quince días, sin goce de haberes (vaya ironía, hacía 240 días que no cobraban), a las catorce maestras que participaban de la creación de la revista. En contra partida, una asamblea de maestros se reunirá en el cine – teatro “Orfeón Español” del centro capitalino de Mendoza y redactó un petitorio firmado por 180 docentes donde pidieron que se revirtiera inmediatamente la medida, disponiéndose además la creación del sindicato “Maestros Unidos”, presidido por Florencia Fossatti, convirtiéndose a la vez, éste en el primer gremio docente del país que se incorporará a FORA (Federación Obrera Regional de Argentina). La situación resultará irreconciliable. Pareciera un absurdo: el gobierno expulsó a los 180 maestros firmantes y como no había docentes para el dictado de clases, no tuvo mejor idea que cerrar las escuelas. Una barbaridad. Al frente de esos maestros: “La Negra” Mendoza, secretaria general de “Maestros Unidos”.

El amor y la política

Para apoyar la lucha docente mendocina llegará a la provincia una delegación de la Liga Nacional de Maestros. Entre ellos: Rodolfo Ghioldi (1897 – 1985), docente, periodista y hermano del reconocido político socialista Américo Ghioldi. Por ese tiempo, las ideas de la Reforma Universitaria de 1918 habían abrazado todos los debates de la época; mucho más los meramente políticos y educativos. Con pinta de galán de telenovela y gran orador, el joven Rodolfo, quien además ostentaba el cargo de vicepresidente de la Federación de Juventudes Socialistas, se verá cautivado por “La Negra”, empezando una relación sentimental.

La acción política y el amor la llevará a radicarse en Buenos Aires en 1920. Incursionará en los círculos de la Federación Universitaria Argentina (FUA). Publicará una serie de novelas (“El dilema” de 1922 y de “La venganza del sexo. Novela realista del amor en la naturaleza” de 1923). Estudiará idiomas. Había sido elegida vicepresidenta del Partido Socialista Internacional, que a la postre se convertirá en Partido Comunista, militando siempre en los sectores más radicalizados: “los izquierdistas”. Su postura intransigente y combativa hará que sea expulsada del mismo comunismo “por extremista”. En paralelo, hasta romperá la relación con Ghioldi en 1925. Incompatibilidad de caracteres, le dicen. Ghioldi era parte de “los burócratas”. “La Negra” representaba la lucha barrial.

A tal punto llegaba su ideario revolucionario, que fundarán el Partido Comunista Obrero y publicarán “La Chispa”, cuya directora precisamente será “La Negra” Mendoza. Desde su grupo “los chisperos”, interactuará y conjugará su pasión política con la intelectual. Traducirá del italiano y el francés a Lennin, Hegel, Trotsky, Descartes, entre muchos más. Manifestará su adhesión a las ideas trotskistas. Ingresará a la Facultad de Filosofía de la Universidad de Buenos Aires. Tomará una visible notoriedad, y cuando todavía las mujeres no habían conquistado su derecho al voto, “La Negra” Mendoza será candidata a concejal (1926) por la Ciudad de Buenos Aires y candidata a la presidencia de la nación en 1928.

La candidata

“Proletario. ¡Tú deber es apoyar al PARTIDO COMUNISTA OBRERO, que es la Vanguardia de tu clase!”; decían los volantes de propaganda pegados con engrudo en las paredes de las fábricas. “Partido Comunista Obrero. Angélica Mendoza, maestra, candidato a presidente; Pedro Jordán, chacarero, candidato a vicepresidente”, sostenía su boleta electoral partidaria. Mientras que en las murallas letras de tiza y carbón: “Angélica Mendoza – Presidenta de PCO”.

Pero no solo el PCO y “La Negra” enfrentaban al oficialismo radical, a “los antipersonalistas”, a los conservadores, a los liberales, sino también a una multiplicidad de partidos de izquierda que se presentaban atomizando el voto de las vanguardias socialistas, comunistas y trotskistas.

Una anécdota sobre “La Negra”. Su año de nacimiento presentará (hoy aún) dudas entre los investigadores. Lo cierto es que para ser candidato a presidente había que tener más de 30 años. Haber nacido en 1897 a “La Negra” le permitiría ser candidata sin inconvenientes. Pero muchos sostienen que Angélica es más joven de lo declaró y que cambió su partida de nacimiento para ser candidata. El mito urbano sobrevoló siempre el mundillo político. Lo que nadie podrá negar fue su coraje y su discurso contra las corporaciones, defendiendo los sectores obreros, esgrimiendo una tenaz resistencia al radicalismo y luchando siempre en pos de los derechos de las mujeres. Y si bien sacó muy pocos votos aquel 1 de abril de 1928 cuando se consagró nuevamente presidente Hipólito Yrigoyen, ante la posterior caída del presidente radical en 1930, encabezó actos de oposición a la dictadura de Uriburu, costándole la cárcel nuevamente. Su libro “Cárcel de Mujeres” (1933) reflejará una semblanza de su prisión.

Volver a Mendoza

Invitaciones a las grandes capitales de Europa, becas en las mejores universidades de EE. UU., participante en todos los simposios internacionales donde el tema de los derechos de la mujer estaba presente, integrante de cuánta organización social y política (nacional o internacional) sostuviera la defensa femenina y la igualdad de género, la tendrán como protagonista; por ejemplo: Secretaria Internacional de la Comisión Interamericana de Mujeres de la Unión Panamericana (organismo antecesor de la OEA) o la Liga Antimperialista de Frankfurt, entre otros. Pero su aurea y talento no solo se agotaba en los núcleos intelectuales de izquierda, “Revista Sur”, “La Nación” o el tradicionalista diario “Los Andes” de Mendoza, la contaron como columnista.

Recomendada por el distinguido historiador José Luis Romero y por su hermano, el filósofo Francisco Romero, volverá a dictar clases en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNC a mediados de la década del ’50.

Morirá el 5 de febrero de 1960. Su amiga y compañera de las primeras luchas docentes, Florencia Fossatti, le preguntó una vez a “La Negra”: “si doce pescadores de Galilea transformaron al mundo, ¿por qué un puñado de maestros no habremos de iniciar para nuestra clase una era de renovación y de justicia?”. Era allá por 1919. La lucha continúa.

Gentileza de Prof. Gustavo Capone

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *