El 13 de febrero de 1938, se produjo la coronación de la Virgen en una solemne ceremonia y en ese día se conmemora el día de la patrona de los viñedos.
La imagen de esta advocación de la Virgen María representa un hito fundamental en la historia mendocina, sobre todo en época de Vendimia. Te contamos como surge esta veneración popular.
El origen de la tradición se remonta al siglo XVII, cuando Antonio Solanilla, un inmigrante aragonés, oriundo de un pueblito llamado Estadilla, ubicado a los pies de la sierra de La Carrodilla, llegó a nuestra provincia.
Mucho antes, en el mismo poblado, la Virgen María con el niño Jesús en brazos hizo su aparición a dos leñadores que se encontraban trabajando, según cuenta la tradición oral. La Virgen mostraba un ramo de uva en su mano izquierda, representando la abundancia. Después de la aparición, los mineros hallaron una veta de metal que les permitió salir de la pobreza.
De esta manera, la fe creció entre los habitantes de Estadilla y declararon a esta advocación como patrona de la Carrodilla, protectora de las tormentas. El nombre de Carrodilla deriva de carrocilla o carro, en referencia a esta tradición.
La primera imagen fue realizada en Estadilla, a fines del Siglo XVII. El rostro es de roble y las manos y el niño están revestidos de cera de abeja natural.
Cuando Antonio se trasladó a Mendoza, llevaba consigo una imagen de la Vírgen e hizo construir una capilla junto a la casona donde vivía, en el límite de Luján de Cuyo.
Siendo la provincia tierra del vino, la virgencita con su racimo de uva en la mano se hizo popular enseguida. Actualmente, la iglesia que aloja a la Virgen se encuentra en Luján de Cuyo.
Saludo de AVM
🙏 Hoy 13 de febrero, se cumplen 85 años de la Coronación de la Virgen de la Carrodilla como Protectora celestial de los viñedos.
Desde la Asociación de Viñateros de Mendoza – AVM, junto a sus asociados, la veneramos, y renovamos nuestra devoción para que esté presente en cada oasis productivo. 🍇🍷
Ya fue erigida su imagen en la zona Este y próximamente lo haremos en Lavalle, Valle de Uco y el Sur mendocino.
Por redacción