La Universidad de Congreso se convirtió en el escenario de un intenso conversatorio sobre el controvertido anteproyecto del Código de Agua. Organizado por la MESA AGROPECUARIA DE MENDOZA, el evento reunió a diversas entidades y especialistas que se manifestaron contra la propuesta del Departamento General de Irrigación, señalando la falta de consulta y consenso en su elaboración.
La mesa de discusión estuvo encabezada por el exgobernador Arturo Lafalla y el Dr. Raúl Pissolito, ex asesor del Departamento General de Irrigación, quienes ofrecieron una crítica contundente al anteproyecto. Lafalla, con su amplia experiencia en análisis legislativo, y Pissolito, autor de varios informes sobre la crisis hídrica, expusieron serias reservas sobre el contenido y el proceso de creación del nuevo Código.
La situación hídrica de Mendoza se encuentra en una etapa crítica, marcada por emergencias recurrentes, una demanda creciente de agua y una infraestructura inadecuada para su distribución. En medio de esta crisis, el Departamento General de Irrigación ha impulsado la redacción de un nuevo Código de Agua sin una participación efectiva de los actores involucrados. Esta falta de consulta ha llevado a la Mesa Agropecuaria a cuestionar la legitimidad y eficacia del anteproyecto.
Eduardo Córdoba, presidente de la Asociación Viñateros, fue tajante en su declaración: “Es inaceptable que el Código de Aguas se esté elaborando de manera inconsulta. Es fundamental que cada departamento desarrolle su programa de ordenamiento territorial y, con base en estos planes, construyamos un plan hídrico integral para Mendoza. Solo así podremos avanzar en la creación de un código que realmente responda a nuestras necesidades”.
Córdoba y otros dirigentes del sector agrario exigieron una revisión exhaustiva del anteproyecto y un verdadero diálogo participativo que incluya a todas las partes interesadas.
La Mesa Agropecuaria anunció que llevará su crítica por toda la provincia, organizando visitas a diferentes departamentos y convocando a otras cámaras y la Asamblea por el Agua para generar una reunión donde se debata de manera más inclusiva el futuro del Código. Esta acción subraya el creciente malestar con el proceso actual y la urgencia de construir consensos amplios.
Además, el evento sirvió para expresar agradecimientos a las entidades organizadoras, como la Asociación de Productores del Oasis Este de Mendoza y la Cooperativa Revivir, entre otras, que desempeñaron un papel clave en la convocatoria. La Universidad de Congreso también recibió reconocimiento por facilitar un espacio para el debate crítico y académico sobre un tema de vital importancia para la provincia.
Por redacción
